PLANTAS PARA EL MAL Y PARA EL BIEN
Plantas para el mal y para el bien.
Siempre se han vinculado los métodos de la brujería tradicional con las plantas, y junto a estas, a las mujeres que hacían sus hechicerías y maleficios.
De forma paralela, y aunque se suela omitir, se realizó un uso de los mismos productos, plantas y hierbas para buscar un supuesto “bien” o contrarrestar un teórico “mal”, al margen de haber específicas para tales objetivos.
Plantas mágicas para hacer el “mal”:
-Agrimonia
-Ciprés (su corteza)
-Mandrágora
-Belladona
-Valeriana
-Estramonio
Plantas para hacer el “bien”:
–Laurel: Este se quemaba cuando una casa se creía estar embrujada.
–Acónito: Mezclada con Ruda, Azafrán y otras hierbas, se hacían fumigaciones para ahuyentar a los malos espíritus.
–Ajo: Se tenía la creencia de que era favorable para preservarse de todos los maleficios.
–Palma: Su hoja bendecida se colgaba en las puertas de los hogares.
Esta es una pequeña muestra de los diversos tipos de plantas que se usaban tanto por un lado como por el otro. En el primer bloque tenemos variedades de plantas venenosas y alucinógenas, mientras que, en el segundo, suelen ser productos con una fuerte base antiséptica o de uso común. Paradójicamente, tanto las consideradas brujas como las no brujas solían hacer uso de todas.
Algunas de las variedades de plantas y hongos vinculados a la brujería:
-Psilocybe: Es un género de hongos conocidos porque varias de las especies en él incluidas (al igual que los de otros géneros) tienen propiedades psicodélicas, debidas a la presencia de psilocina, psilocibina y baeocistina, entre otras sustancias.
-La ruda (Ruta): Es un género de subarbustos siempre verdes fuertemente aromatizados de 2–6 metros de altura, de la familia de las Rutaceae, nativas de la región del Mediterráneo, Macronesia y el sudoeste de Asia. Si bien es usada “desde siempre” como una planta medicinal, tiene una muy fuerte toxicidad, según los usos y dosis.
-Datura stramonium (Estramonio): Es una planta psicoactiva y sus alcaloides, a partir de determinadas dosis, presentan efectos neurotóxicos. De todas las partes de este vegetal, las semillas son las más tóxicas, ya que más de 30 pueden constituir una dosis letal. Cinco gramos de la planta causan envenenamiento. Contiene los alcaloides: hiosciamina, escopolamina y atropina. La actividad anticolinérgica de estos alcaloides produce un delirio alucinatorio incontrolable de numerosas horas, cuando no la muerte.
-Amanita muscaria: También conocido como matamoscas o falsa oronja, es un hongo basidiomiceto muy común, del orden Agaricales. En dosis muy altas tiene un gran efecto neurotóxico, mientras que si está seca su potencial alucinógeno es mucho más alto. En grandes cantidades puede inducir al coma.
-La Belladona (Atropa belladonna): Es una especie de arbusto perenne, de la familia Solanaceae. Sus alcaloides (hiosciamina, atropina, escopolamina), derivados del tropano, la convierten en una planta venenosa, capaz de provocar estados de coma o muerte si es mal administrada. En dosis tóxicas provoca cuadros de delirio y alucinaciones. A pesar de ello, la planta se utiliza medicinalmente en oftalmología como midriático, como antiespasmódico, antiasmático, anticolinérgico, etc. Correctamente utilizada en neumonología se usa para problemas de espasmos bronquiales, aunque puede acarrear escasez de secreciones.
-Mandragora: Perteneciente a la subfamilia Solanoideae e incluida en la familia de las solanáceas (Solanaceae) fue utilizada con fines curativos. Hoy en día sirve como especia de cocina (si está curada) o como estupefaciente (si no está curada).
-Hyoscyamus niger: Es una planta venenosa que tiene muchos alcaloides como principio activo, principalmente hiosciamina, en dosis elevadas se convierte en narcótico. En los pueblos primitivos se utilizaba como afrodisíaco, siendo el principal componente de los “filtros de amor” y en la actualidad se utiliza bajo control médico para tratar los “delírium tremens”, epilepsia, insomnio, terrores, bronquitis asmática, etc.
-Aconitum napellus (acónito común): Es una especie perteneciente a la familia Ranunculaceae. Es venenosa al ser administrada por vía interna y ocasiona neurotropismo en los centros nerviosos, especialmente en el sistema respiratorio. Tiene efecto analgésico y antiinflamatorio.
-La adormidera o “planta del opio” (Papaver somniferum): Es una planta herbácea perteneciente a la familia de las Papaveraceae. Tiene un alto contenido en alcaloides, por lo que son usadas para la fabricación de opio.
-Cicuta (Conium maculatum): Es una especie botánica de planta con flor herbácea de la familia de las apiáceas y, dentro de esta, perteneciente al género conium. Toda la planta contiene alcaloides, entre los que se destacan glucósidos flavónicos y cumarínicos y un aceite esencial, además de la coniceina y la coniína (también llamada conina, conicina o cicutina) una neurotoxina que inhibe el funcionamiento del sistema nervioso central produciendo el llamado “cicutismo”. El efecto de esta toxina es semejante al curare. La cicuta ha sido usada por sus propiedades antiespasmódicas y como sedante para calmar dolores persistentes e intratables, como los producidos por el cáncer y las neuralgias. En la antigüedad, los médicos árabes y griegos la utilizaban en diversas dolencias, tales como la artritis. Sin embargo, no era siempre eficaz, ya que la diferencia entre una dosis terapéutica o tóxica es muy pequeña.
-Adiantum capillus-veneris (culantrillo de pozo): Es una especie de helecho del género Adiantum. Es un excelente demulcente, con efecto antiinflamatorio, béquico, mucolítico y expectorante. Sirve como desintoxicante en casos de etilismo, galactógeno, antifurfuráceo, según autores diaforético. Astringente, emoliente, diurético, emenagogo. Indicado para faringitis, bronquitis, catarros, asma, Cistitis, uretritis. En uso tópico se usa en: dermatitis, estomatitis, gingivitis, parodontopatías, vulvovaginitis.
-La verrucaria (Heliotropium europaeum): Es una especie de planta herbácea perteneciente a la familia de las boragináceas. Es usado como colerético, colagogo, febrífugo y emenagogo.
- El botón de oro, corona de rey, caléndula, caldo, chinita, flamenquilla, flor de difunto, maravilla, rosa de muertos o cempasúchitl (Calendula officinalis): Es una hierba de la familia de las asteráceas. Se utiliza externamente en forma de infusiones, tinturas y pomadas para el tratamiento de inflamaciones de la piel y las mucosas, heridas o procesos de cicatrización, contusiones, forúnculos, eritema, faringitis, dermatitis y como calmante en cosmética. En la medicina popular se ha utilizado internamente por el tratamiento de amenorrea, dismenorrea, gastritis, espasmos del tubo digestivo, úlceras gastroduodenales, colecistitis, angiocolitis crónicas, insuficiencia hepática y migrañas, pero estos usos no tienen una base científica sólida.
-Cichorium intybus, la escarola, achicoria común o radicheta: Es una planta herbácea perenne de la familia de las asteráceas. Paracelso la recomendaba en emplastos para las irritaciones de la piel, y en infusión para tratar enfermedades del sistema digestivo y del hígado, y como estimulante de la bilis. Esta planta también puede utilizarse para lavado de eczemas, aunque en personas proclives puede provocar reacciones alérgicas.
-Taraxacum officinale, la achicoria amarga, también conocida como diente de león y meacamas: Es una especie de planta con flor de la familia de las asteráceas. Es una planta depurativa, indicada para purificar el organismo de elementos tóxicos. Puede actuar en el hígado, riñón y la vesícula biliar, y con su efecto diurético evita la aparición de piedras en el riñón. También es un tónico digestivo contra el estreñimiento y la resaca de alcohol. Para uso tópico es eficaz para limpiar las impurezas de la piel, acné, urticaria.
-La Sempervivum tectorum: Es una herbácea de la familia de las crasuláceas. Se le conoce también con los nombres de barba de Júpiter, consolva, siempreviva mayor y alcachofa de gatos. Su principal uso a nivel popular es para las distintas afecciones y problemas de la piel. Su poder emoliente es ideal para pieles inflamadas por picaduras, grietas y quemaduras. Como planta vulneraria se aplica en casos de heridas, úlceras y llagas, pues posee la virtud de curar y acelerar la cicatrización protegiendo de cualquier infección y colaborando en la regeneración de la piel. Es muy útil como astringente para cortar diarreas y vómitos cuando existe gastroenteritis.
0 comentarios:
Publicar un comentario